Description

A esta cosita tan preciosa la recogimos hace ya varios meses y la bautizamos con un nombre casi igual de bonito que ella, “Serea”. Esta sirena de tierra adentro apareció abandonada en un monte cuidando de sus tres pequeños cachorros protegidos al amparo de unos matorrales, los sacó adelante con pocos medios pero gorditos y sanos como la estupenda madre que era, sus hijos hace tiempo que encontraron familia, y ahora le toca a ella encontrar el camino a casa.

A esta cosita tan preciosa la recogimos hace ya varios meses y la bautizamos con un nombre casi igual de bonito que ella, “Serea”. Esta sirena de tierra adentro apareció abandonada en un monte cuidando de sus tres pequeños cachorros protegidos al amparo de unos matorrales, los sacó adelante con pocos medios pero gorditos y sanos como la estupenda madre que era, sus hijos hace tiempo que encontraron familia, y ahora le toca a ella encontrar el camino a casa.
Serea es una grifona pequeñita de pasitos cortos y mirada triste, es muy tímida cuando no conoce y tantos meses en el refugio la están haciendo todavía más recelosa con los desconocidos de lo que ya era. Esta tímida sirena le ladra a las visitas que podrían darle un hogar y cambiarle la vida, si no observas su mirada puedes pensar que es mala, pero si la miras con atención puedes ver claramente que sólo se está comunicando contigo, te está diciendo que tiene miedo y que deberías ir despacito porque está asustada, ella en realidad es un perrita muy dócil y ávida de amor, cuando supera su recelo inicial se muestra como la criatura cariñosa y tremendamente buena que realmente es.
Serea es prudente y educada, nunca te salta encima exigiendo nada, sólo se acerca despacito con la cabecita baja pidiendo permiso para entrar en tu espacio, es tierna como una chiquilla triste que no supiera que puede esperar de ti. Serea no es apta para cualquiera porque al principio requerirá paciencia y delicadeza, es muy sensible, muy frágil, es muy fácil hacerle daño y asustarla, es como un cervatillo que se supiera vulnerable e indefenso, hay que tratarla como tratarías a una valiosísima figurita de porcelana que no puedes ni apretar demasiado ni dejar caer, y no todo el mundo sabe tratar la porcelana…
A Serea no le gusta la ciudad, sus prisas y su barullo la desconciertan, pero les gustan mucho los otros perros y ayuda a mantener el orden en su canil cuando alguno se desmadra, es limpia y tranquila, Serea será una compañía deliciosa y un remanso de paz para la afortunada familia que decida dar el paso de conocerla y dejarse arrullar por los cantos de esta sirena tan frágil.

Sexo:

Hembra

Tamaño:

Pequeño

Edad:

Adulto

Esterilizado:

Si